Asturias se congela.

La masa de aire polar que azota Asturias estos últimos días produjo ayer en algunas zonas temperaturas próximas a los once grados bajo cero, además de las primeras heladas serias del otoño. Así, los termómetros se desplomaron en la madrugada del lunes en Asturias hasta los 10,8 grados bajo cero, una mínima registrada en la localidad de La Raya (Aller), en la vertiente asturiana del puerto de San Isidro, a las siete de la mañana. Sólo algún punto de la costa se libró de registros bajo cero en los termómetros, como es el caso de Luanco, con una mínima de 3,1 grados. Sin embargo, en zonas de Gijón, como el barrio de Somió, los termómetros marcaron 1,7 grados bajo cero. Mientras, en Cangas del Narcea las temperaturas se desplomaron hasta los -3,1 grados, la segunda mínima registrada en el Principado después de la de La Raya. Asturias es una de las 31 provincias del norte y del centro peninsular que seguirá hoy en alerta amarilla (riesgo) por nieve y frío. Y no se prevé que la situación mejore, al menos hasta el fin de semana. Es más, empeorará el jueves.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé para el jueves en Asturias precipitaciones abundantes en forma de nieve en cotas muy bajas, de 100 y 200 metros sobre el nivel del mar, por lo que podría nevar en prácticamente cualquier punto de la geografía asturiana.

Aunque las heladas de la madrugada de ayer hicieron tiritar Asturias, dieron paso a un día soleado que contribuyó a la mejora de la situación de las carreteras de montaña asturianas. Mientras que a última hora del domingo era necesario el uso de cadenas en seis puertos de montaña, la cifra se redujo ayer a tres puertos: Connio (Cangas del Narcea), La Colladiella (San Martín del Rey Aurelio) y Ventana (Teverga). Además, sigue siendo necesario el uso de cadenas en la carretera AS-264 en Cabrales, concretamente en Arenas de Cabrales y Sotres. La carretera de acceso a los lagos de Covadonga es la única que permanece cortada al tráfico en el Principado por la meteorología adversa.

La Agencia Estatal de Meteorología prevé para hoy una situación similar a la de ayer, aunque con el avance del día la cota de nieve se desplomará desde los 600 a los 400 metros. Los cielos estarán poco nubosos, a excepción de la Cordillera, donde las precipitaciones serán más abundantes. Las temperaturas máximas se mantendrán y las mínimas sufrirán un ligero ascenso. Se prevén acumulaciones de nieve de seis centímetros en la Cordillera y de dos centímetros en los valles mineros. La alerta amarilla seguirá el miércoles, con más nubes y precipitaciones, que serán en forma de nieve por encima de los cuatrocientos metros, según las mismas predicciones de la Aemet. El jueves será el peor día de toda la semana, al desplomarse de nuevo las temperaturas mínimas y descender la cota de nieve hasta los 100 metros.

La Aemet espera que la situación mejore, al menos en cuanto a frío y nieve se refiere, de cara al fin de semana. Eso sí, se esperan lluvias tanto el sábado como el domingo.

Hace aproximadamente un año, en diciembre de 2009, Asturias también vivía el primer temporal de la campaña, que motivó entonces la caída de los termómetros hasta 20 grados bajo cero en los Picos de Europa. Sin tiempo para la recuperación, 2010 se estrenó con una «nevadona» histórica, la mayor de los últimos diez años, que tiñó de blanco toda la región, incluida la costa, y dejó seis grados bajo cero en Oviedo, menos tres grados en Gijón y Avilés, menos siete grados en Llanes y Langreo el 10 de enero.